Carta abierta a:
Dª
Manuela Carmena Alcaldesa de Madrid
Dª
Cristina Cifuentes Presidenta de la Comunidad de Madrid
Estimadas señoras:
Ante el anuncio hecho tanto por el
Ayuntamiento como por la Comunidad de Madrid de introducir el aprendizaje del idioma
Inglés en las Escuelas Infantiles del Ayuntamiento y en el 2º ciclo de Infantil
en los Colegios, las organizaciones firmantes de esta carta queremos manifestarles nuestra preocupación.
Conocemos las ventajas de la adquisición de
una segunda lengua, y más de una, para el desarrollo personal, las puertas que
nos abre en la vida, las posibilidades que brinda en el mundo laboral y social.
De forma individual y también social se hacen muchas promesas y se invierten
muchos esfuerzos en relación con esta posibilidad.
Quienes trabajamos en Madrid con las niñas y
niños de cero a seis años nos preguntamos cuáles serían las formas y los
momentos más adecuados para introducir el aprendizaje de una segunda lengua,
teniendo en cuenta que no estamos en entornos de inmersión lingüística.
Porque, en un caso como el nuestro, una mirada más
amplia nos muestra que la práctica totalidad de países europeos lo introducen
en primaria con éxito, que el desarrollo en estas edades es global y que los
enfoques de enseñanza han de ser, en coherencia, globalizadores, lo que además
suele recogerse en los preámbulos normativos de la Etapa Infantil, y en las
recomendaciones de la UNESCO para estas edades.
La propuesta que en este sentido hace el
Ayuntamiento de Madrid para el primer ciclo de Educación Infantil es la de
resaltar la importancia del idioma Inglés en una edad en la que se construye la
comunicación de los niños y niñas. La prioridad en el nuevo espacio que
representa la Escuela Infantil es la comprensión mutua entre el niño o niña y
la nueva figura que será vincular a través de vías de comunicación, entre las
que el lenguaje oral no es sino una más. Una criatura que sabe que es entendida
por el adulto quien, sin embargo, le habla en un idioma que no entiende, vive
con ansiedad la comunicación y se retrae en un momento privilegiado de la
construcción emocional y cognitiva de la misma. Los entornos de inmersión
naturales en que los progenitores tienen distintas lenguas, o en donde la de la
familia y la del entorno escolar no coinciden, nada tienen que ver con las características y efectos que artificialmente son creados en la escuela
para introducir un nuevo idioma. Enfatizar
el aprendizaje del Inglés en el nuevo modelo de educación infantil
municipal, cuyo currículo aún no se ha definido, no responde a las necesidades
infantiles. Puede ser, además, altamente
contraproducente al obligar a los equipos educativos a tener que focalizar un
aspecto para dar respuesta a una imposición administrativa. Son las personas
expertas en educación infantil quienes ofrecen unos criterios rigurosos que
hasta ahora la administración no ha dado.
No podemos sino temer que la necesidad de desarrollo global, integral y
equilibrado de las múltiples potencialidades infantiles, quede además mermada al ponderar un aprendizaje,
que no corresponde, sobre el resto. Muy especialmente si como parece, será un
elemento extra a puntuar en los concursos para obtener la gestión de las
Escuelas de titularidad municipal.
Es cierto que los niños y niñas tienen enormes
capacidades y que intereses adultos, ajenos a sus necesidades y derechos,
pueden lograr que aprendan vocabulario de Inglés, del mismo modo que son
capaces de memorizar el nombre y autor de un cuadro. Pero ninguna de las dos
cosas les aporta nada para su desarrollo armónico y sí les roba un tiempo
precioso que ha de estar vinculado a lo que es propio de la cultura de la
infancia, las actividades libres y autónomas, las experiencias de su interés y
procesos de socialización y comunicación donde la calidez, la calma, la
seguridad y el bienestar han de ser señas de identidad.
Ahora nos encontramos con el proyecto de
ampliación del Bilingüismo al segundo ciclo de Educación Infantil en Madrid
(que ya existe en los centros
denominados bilingües con resultados más que discutibles). ¿Qué nos propone
para implantarlo? ¿La división por materias para la enseñanza del idioma, en la
misma línea que el programa bilingüe de la Comunidad de Madrid para Primaria y
Secundaria? ¿Pretenderá que el profesorado de Inglés llegue a las aulas a
enseñar a los pequeños Conocimiento de sí mismo o del entorno, por ejemplo?,
¿desvinculando las relaciones lingüísticas, artísticas, lógicas o
experienciales según la lengua en que supuestamente deben aprenderse unas y
otras? ¿Justamente en la línea contraria a una propuesta de globalización de
los contenidos, de trabajo por Proyectos, donde se tratan todas las áreas a la
vez, respetando los procesos significativos para los niños y niñas y cuya
puesta en práctica parece que está avanzando en los centros educativos? Esto
solo aporta confusión y dificultad a quienes se pretende que aprendan un idioma
a estas edades, sin tener en cuenta si tienen o no asentadas las estructuras de
la lengua materna, así se desconciertan y no les resulta fácil distinguir lo
que se les está proponiendo.
Desde hace muchos años se han impuesto los
enfoques comunicativos en este aprendizaje, aquellos que consideran a una
lengua como la forma de comunicación entre las personas y por ello priorizan el
entendimiento y el establecimiento de códigos comunes entre ellas para acceder
a una lengua y a su cultura, no siendo estas edades las apropiadas para
introducirlos según todos los estudios rigurosos al respecto, y las
recomendaciones de la UNESCO
Si escuchamos al profesorado de los centros
de Primaria y Secundaria, entenderemos su preocupación por la pérdida de nivel
académico del alumnado y la segregación que está provocando, ya que tienen que
aprender contenidos en un idioma del que no tienen los conocimientos básicos (no
conocen la lengua inglesa) y esta no parece ser la forma en que los están
adquiriendo, pudiéndose o no compensar parcialmente solo para quienes disponen
de recursos privados para ello. La falta de evaluación del programa tampoco
parece ayudar al mismo.
En otros países de Europa, que se han
preocupado por las lenguas extranjeras desde hace ya muchos años, y cuyos
sistemas educativos son ejemplos para el nuestro, como Suecia, Finlandia,
Dinamarca, Alemania, Francia, Reino Unido, Portugal, Luxemburgo, Austria, Suiza
y otros, la enseñanza de una lengua extranjera comienza durante la etapa
Primaria, casi nunca en los dos primeros cursos. Curiosamente, muchos de ellos
obtienen mejores resultados que los nuestros al final de la etapa obligatoria.
En dichos países están priorizando aspectos básicos de la
Educación Infantil como: una educación donde las niñas y niños son tratados con
máximo respeto a sus procesos de comprensión y desarrollo, instalaciones
adecuadas, profesorado cualificado y en un número adecuado para atender
necesidades y derechos de las criaturas, atención a necesidades específicas,
programaciones coherentes y desarrollo de unas redes de centros de Educación
Infantil de calidad.
Pensamos que las premisas
socio-neuro-psico-pedagógicas deben ser la base de cualquier propuesta
innovadora en la enseñanza. No es
improvisando o adelantando aprendizajes que no corresponden a la edad y madurez
de los niños y niñas como se desarrolla una propuesta de calidad para la Etapa
Infantil. En este sentido, tanto las Escuelas Infantiles como los Colegios de
Infantil de nuestra Comunidad tienen aspectos urgentes y básicos a cubrir, como
los desarrollados en otros países europeos. Los
niños y niñas de 0 a 6 años tienen derecho a estar escolarizados en
escuelas cálidas y de calidad, progresivamente gratuitas, con el mejor
profesorado, con una ratio adecuada para
desarrollar la mejor educación, en los mejores espacios.
Pedimos por todo lo expresado a Uds y a todas
las personas que ocupan cargos en la administración que pongan el énfasis en lo
que es realmente importante en estas edades y dejen de introducir palos en las
ruedas del desarrollo infantil y del buen quehacer profesional.
Plataforma de Madrid por la
defensa de la Educación Infantil 06
Junta de Portavoces de Educación
Infantil Pública 0-6 años
2 de febrero 2017