Las Fiestas de Navidades y Fin de Año, seas o no creyente, son una ocasión de encontrarse que forma parte de la cultura popular, de nuestra historia, de nuestra memoria; y lo hacen con muchas alegrías y también con decepciones, por sobredimensión de lo que se supone que has de sentir y que quizás no puedes encontrar en ti en muchos periodos vitales, o por ausencia de lo que nunca llega.
A pesar de todo, mantener la posibilidad de hacer un hueco en una vida tan ajetreada, para estar juntos y juntas, para celebrarlo, para compartir, sigue teniendo sentido porque somos la tribu humana y dicen los antropólogos que los rituales, antiguos o nuevos, son importantes para hacer altos y recargar pilas. Enviar y recibir buenos deseos sigue teniendo sentido e intercambiar esperanzas sobre un mundo mejor también sigue teniendo sentido, aunque eso sí, poniendo de la parte de cada cual para que la unión de esfuerzos haga posible la realidad deseada, camino del ideal compartido.
Pues aquí va nuestra aportación reflexiva. Un pequeño recordatorio de este año teñido, como la vida, sombras y luces en la Educación Infantil.
Entre las sombras se encuentran el aumento de las aulas de dos años en los colegios de más comunidades Autónomas (pinchar aquí), el mantenimiento general de ratios escandalosas, el maltrato comparativo que recibe el primer ciclo y sus profesionales o el obcecamiento de las administraciones en no regular, con las mismas características, todos los centros que acogen a criaturas comprendidas en estas edades. Esto último ha posibilitado la terrible situación que en Baleares (pinchar aquí) pretende establecer una red de guarderías de bajo coste que regule allí lo existente, sin regulación, en toda España; eso sí, centros a los que, si no se remedia con la presión de todo el mundo (pinchar aquí), asistirán quienes menos tienen porque son de menor calidad, quienes siempre pierden. Siempre diciendo que se pretende dar solución a problemas, pero siempre del modo más fácil económicamente, aunque pierdan las criaturas. Todo ello situado en un mismo paquete: el incumplimiento sistemático de la Convención de los derechos del niño (pinchar aquí) por parte de los sucesivos gobiernos;esta fija el Interés superior del menor como guía de cualquier política o actuación que le afecte directa o indirectamente..
Pero también tenemos luces que hay que saber ver para alimentar la esperanza. Entre ellas que el Ayuntamiento de Madrid tiene una nueva ordenanza (pinchar aquí) para su red infantil que este curso ha empezado a implementarse: ha introducido la pareja educativa en las Escuelas Infantiles municipales (pinchar aquí), reduciendo así, de facto, las ratios; ha disminuido las cuotas de familias y, a pesar de haberse olvidado de la remunicipalización, al menos ha mejorado sustancialmente los pliegos para poder detener la "venta" de Escuelas y Casas de Niños que sigue estando presente en el resto de la Comunidad (pinchar aquí). También se ha creado una nueva organización de Educadoras Infantiles en Madrid (Colectivo en defensa de los derechos laborales) que ha elaborado un manifiesto y a la que damos la bienvenida a la lucha (pinchar aquí). En Granada La Escuelas Infantiles del Patronato dependiente del Ayuntamiento han creado la Plataforma Si 06 Granada que promete muchísimo (pinchar aquí).
Nosotras, con mucho esfuerzo y una ingente cantidad de ilusión hemos aportado nuestra luz particular "disoñado" un Congreso para febrero: Ser y crecer felices: un derecho cotidiano (pinchar aqui). Está centrado en la Educación Infantil, en el derecho a la educación desde el nacimiento y en su relación con el resto de derechos asociados, en los lenguajes infantiles, en su trascendencia, en su conocimiento, en su práctica y en su reivindicación. Y queremos compartirlo con vosotras y con vosotros.
Luces y sombras, sombras y luces, que forman parte de la vida y de las que siempre hay que procurar extraer la parte medio llena de la metafórica botella, para que un futuro mejor sea posible.
Y este es nuestro deseo: enviaros todo nuestro cariño y pedir lo mejor para todo el mundo en este nuevo 2018, en especial para todas las criaturas, sus familias y el conjunto de profesionales que forman la comunidad educativa "benjamina" del sistema.
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