Este artículo de El País, titulado "Lentejas o pizza: la política entra en el menú" es muy interesante y muestra cómo distintos ayuntamientos han dado diferentes respuestas a una misma necesidad, a un derecho infantil, desde distintas perspectivas y valores, comida saludable o comida rápida, que en ningún caso pueden las administraciones convertir en la base alimenticia de nuestros niños y nuestras niñas. Además, se ha visto cómo no era necesario mandar a un ERTE a un grupo de personas cuando se le ampliaba la contratación a otro.Desde aquí pedimos que siga cundiendo el ejemplo y que todos los niños y todas las niñas de Madrid que lo precisen (y las otras personas a las que Leganés o Rivas, por ejemplo, están también dando respuesta) puedan, en estas trágicas circunstancias, seguir alimentándose de forma sana.
"En Leganés, 1.800 personas vulnerables recogieron este jueves los menús que prepara la empresa de catering Comaibel, que se encarga de hacer la comida de los colegios del municipio del sur de Madrid. Comieron primero y segundo caliente. Pero manteniendo una máxima: que fuera comida saludable. Se trataba de abastecer a los que no tienen nada que llevarse a la boca estos días. No solo a los alumnos sin recursos que tienen reconocida la Renta Mínima de inserción (RMI) o con una beca parcial de comedor, también a personas sin hogar y mayores desprotegidos..."
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